Lo que nadie te dice del nuevo smartphone plegable triple de Huawei: su increíble precio
La reconocida marca china lanzó un plegable con tres pantallas. ¿Será un producto global? Te lo contamos aquí.
La revolución de los smartphones plegables cambió el modo de diseñar dispositivos. Actualmente, la innovación en smartphones está de camino a la producción de pantallas de mayor tamaño que sean prácticas en el uso diario. Los plegables son prueba de ello.
El Huawei Mate XT Ultimate Design presenta un innovador diseño plegable nunca antes visto, pero se aleja de los productos masivos por su elevado precio. Este teléfono, lanzado recientemente por Huawei, se destaca por ser el primero en el mundo con una doble bisagra y una pantalla triple, lo que permite múltiples configuraciones y modos de uso.
Sin embargo, el costo del Huawei es alto, comenzando en 19,999 yuanes (alrededor de $2,809 dólares) para la versión de 256 GB de almacenamiento, y subiendo hasta $3,370 dólares para la opción de 1 TB.
Video lanzamiento del Huawei Mate XT Ultimate Design:
El Mate XT Ultimate Design cuenta con una pantalla OLED de 6.4 pulgadas cuando está plegado, pero puede desplegarse hasta 10.2 pulgadas en formato completo, lo que lo convierte en un dispositivo versátil. Esta capacidad para cambiar entre diferentes tamaños de pantalla es uno de sus principales atractivos. La pantalla también se puede configurar en un tamaño intermedio de 7.9 pulgadas para situaciones que requieran menos espacio. Además, el teléfono incluye una batería de 5600 mAh, que admite carga rápida tanto por cable como de forma inalámbrica, y una cámara trasera de triple lente con sensores de hasta 50 megapíxeles.
No obstante, el precio elevado del Mate XT plantea interrogantes sobre su viabilidad en el mercado global, especialmente fuera de China. A pesar de haber registrado 3.7 millones de pedidos anticipados en el país asiático, su éxito fuera de esta región es incierto. La tendencia a fabricar teléfonos plegables con pantallas flexibles, si bien innovadora, también implica mayores riesgos de durabilidad. Las bisagras y la pantalla son elementos delicados en comparación con los teléfonos convencionales, lo que podría limitar su adopción a largo plazo.