Estas son 3 razones por las que se enciende la luz Check Engine en tu automóvil
Pueden ser muchos los inconvenientes que podría generar que se encienda la luz check engine en tu automóvil.
Muchos de los problemas que hacen que se encienda la luz de Check Engine en tu automóvil son sencillos y se pueden resolver rápidamente. Sin embargo, es crucial que no ignores esta advertencia, ya que algunos de estos problemas podrían empeorar si no se abordan adecuadamente.
Un punto clave para tener en cuenta es que el código de falla que provoca que la luz se encienda se guarda en la computadora de a bordo de tu coche. Puedes recuperar este código utilizando un dispositivo simple, lo que te dará una idea clara de lo que sucede bajo el capó. Realizar esta verificación por tu cuenta puede ayudarte a ahorrar dinero a largo plazo.
A continuación, detallamos los tres problemas más comunes que pueden provocar la activación de la luz de "Check Engine" en tu automóvil.
1- La tapa de gasolina podría estar suelta
Un tapón de gasolina suelto es una de las razones más frecuentes por las que se activa la luz del motor. Aunque pueda parecer sorprendente, la tapa desempeña un papel vital en el sistema de combustible de un automóvil, ya que impide que los vapores de gasolina escapen del tanque y contribuye a mantener la presión adecuada en todo el sistema.
Si la luz Check Engine del motor se enciende justo después de llenar el tanque, detente y verifica que la tapa esté bien ajustada, o asegúrate de que no se haya quedado olvidada en el techo de tu coche, algo que le ha pasado a más de uno. En algunos casos, puede ser necesario reemplazarla, pero no es un gasto elevado. La mayoría de las tiendas de repuestos ofrecen tapas de gasolina universales por alrededor de $15 dólares.
2- Podría existir un fallo del convertidor catalítico
El convertidor catalítico forma parte del sistema de escape del automóvil y se encarga de transformar el monóxido de carbono generado durante la combustión en dióxido de carbono. Aunque es una pieza bastante sencilla, su mal funcionamiento puede prevenirse en gran medida. Esto es positivo, ya que reemplazar un convertidor puede costar entre $200 y $600 dólares, dependiendo de la marca y del modelo de tu coche. Todos los vehículos nuevos que usan gasolina vienen equipados con un convertidor catalítico.
Para asegurar que el convertidor catalítico de tu coche se mantenga en buen estado, es esencial realizar mantenimiento regular, como los cambios de aceite. Si vives en una ciudad y conduces principalmente en trayectos cortos, haz un viaje ocasional por carretera para evitar que el convertidor se obstruya. Además, mantén un ojo atento a cualquier humo inusual que salga del escape o a sonidos extraños que puedan indicar problemas.
3- Tu automóvil podría tener una fuga de vacío
Cada automóvil cuenta con un sistema de vacío que cumple diversas funciones. Entre ellas se encuentra el refuerzo de frenos, que opera utilizando vacío, y el sistema también contribuye a reducir las emisiones al canalizar los vapores generados por la evaporación de la gasolina a través del motor. Si notas que el ralentí de tu coche fluctúa o se mantiene a una velocidad anormalmente alta, podría ser un signo de una fuga en el sistema de vacío.
Las mangueras de vacío pueden deteriorarse y agrietarse con el tiempo, especialmente si están expuestas a temperaturas extremas. Este es el problema más frecuente relacionado con fugas de vacío. Otros inconvenientes comunes incluyen accesorios dañados y conexiones sueltas. Aunque las conexiones de vacío suelen costar solo unos pocos dólares cada una, localizar la fuga puede ser un proceso que lleva tiempo y puede resultar costoso si no realizas la reparación por tu cuenta.