No pegan una: el nuevo fork de Ryujinx desafia a Nintendo en la batalla por la emulación de la Switch

Nintendo es reconocida tanto por su legado de videojuegos como por su férrea defensa de la propiedad intelectual. Su postura sobre los emuladores, incluso aquellos destinados a rescatar juegos clásicos, ha sido siempre implacable, buscando que sus títulos solo puedan disfrutarse en sus consolas oficiales. Sin embargo, esta normativa no siempre es consistente: la compañía japonesa se sorprendió recientemente al abrir un museo en su país de origen, donde utiliza emuladores en Windows para mostrar su historia de videojuegos, en lugar de sus propias consolas.

El emulador Ryujinx, uno de los más destacados para la Nintendo Switch, fue la última víctima de los esfuerzos legales de Nintendo. Su desarrollador, conocido como gdkchan, decidió discontinuarlo abruptamente sin ofrecer explicaciones, aunque la comunidad sospecha que la razón detrás de su cierre se relaciona con una potencial amenaza de demanda. A principios de año, Nintendo había presionado exitosamente al emulador Yuzu, que acabó cerrando mediante un acuerdo extrajudicial. Esta situación refleja la constante presión legal que Nintendo ejerce para detener la emulación de sus consolas modernas.

A pesar del cierre de Ryujinx, al tratarse de un proyecto de código abierto, era solo cuestión de tiempo para que alguien decidiera retomar el desarrollo. GreemDev, un programador conocido en la comunidad de emulación, ha lanzado un nuevo fork de Ryujinx, con la intención de seguir desarrollando el emulador desde la última versión liberada por gdkchan. La decisión de GreemDev llega en un momento delicado, pues la amenaza de acciones legales por parte de Nintendo sigue presente.

Actualmente, el nuevo proyecto de Ryujinx es accesible en GitHub, aunque con una documentación mínima. Según la página del proyecto, la falta de información detallada responde a una estrategia para dificultar cualquier intento de Nintendo de presentar una demanda en su contra, un recurso utilizado por varios desarrolladores para mantener la existencia de sus proyectos en un limbo legal.

La popularidad de los emuladores, como Ryujinx, Yuzu y otros para consolas de generaciones anteriores, resalta el deseo de los jugadores de disfrutar títulos clásicos y modernos sin necesidad de hardware específico, algo que Nintendo sigue enfrentando con legales. Mientras tanto, GreemDev y otros desarrolladores en la comunidad mantienen la esperanza de que este tipo de proyectos puedan continuar, asegurando que el código original de Ryujinx permanezca accesible y que existan futuras actualizaciones.

Queda por ver si Nintendo emprenderá acciones contra esta nueva versión de Ryujinx, o si el proyecto logrará mantenerse en un limbo operativo, desafiando las políticas de la empresa japonesa. La batalla entre los emuladores y Nintendo se perfila como una larga contienda, en la que cada nuevo fork se convierte en una especie de resistencia digital para los fans de la compañía.