Deepfakes de Taylor Swift desatan crisis en Red Social X: bloqueo de búsquedas y contraofensiva

La red social X, anteriormente conocida como Twitter, ha tomado medidas drásticas al bloquear temporalmente las búsquedas relacionadas con Taylor Swift, en respuesta a la difusión de imágenes explícitas generadas con inteligencia artificial(IA). La decisión, catalogada como inédita, busca frenar una campaña difamatoria que ha afectado a la reconocida cantante. Aunque se establece como una medida temporal, no se especifica la duración exacta.
En los últimos días, los intentos de búsqueda del nombre de Swift sin comillas resultaron en un mensaje de error y la leyenda: “No te preocupes, no es tu culpa”. Al entrecomillar el nombre, surgieron publicaciones con contenido erótico, señalando la magnitud del problema en la plataforma.
El sitio Celeb Jihad, conocido por su historial de contenido controvertido, utilizó inteligencia artificial para crear imágenes sexualizadas de Taylor Swift. Cuentas vinculadas a este sitio comenzaron a compartir estas imágenes explícitas en línea, desatando una rápida movilización de los "Swifties", la base de fanáticas de Swift, que lanzaron una contraofensiva en X con el hashtag #ProtectTaylorSwift, inundando la plataforma con imágenes positivas de la estrella del pop.
Desde la red social de Elon Musk, las cuentas que compartieron los deepfakes fueron suspendidas o expulsadas, pero no antes de alcanzar más de 45 millones de visitas. Joe Benarroch, jefe de operaciones comerciales de X, afirmó que la acción es temporal y se realiza con precaución, priorizando la seguridad. Además, declaró: "Publicar imágenes de desnudos difundidas sin consentimiento de una de las partes está completamente prohibido en X y tenemos una política de tolerancia cero hacia dichos contenidos".
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El grupo de detección de deepfakes Reality Defender rastreó una avalancha de material no consensuado que representaba a Swift, encontrando más de una veintena de imágenes únicas generadas por IA. Aunque la tecnología para producir estas imágenes es cada vez más accesible, la pregunta persiste sobre la capacidad de las plataformas para abordar de manera efectiva campañas de desprestigio, especialmente en casos de personas menos conocidas y más vulnerables.