Elon Musk logra burlar el bloqueo de X en Brasil con Starlink

Elon Musk logra burlar el bloqueo de X en Brasil con Starlink

Luego de que el país latinamericano prohibiera el acceso a la red social, Musk propone dos soluciones para evitar el bloqueo.

Constanza Ferreyra

Constanza Ferreyra

El conflicto entre Elon Musk y el Tribunal Supremo de Brasil por la prohibición de X plantea cuestiones sobre la soberanía digital en la era de las plataformas globales y la conectividad satelital. Tras la orden de bloqueo de X en Brasil por parte del juez Alexandre de Moraes, Elon Musk, desafía la decisión a través del uso de su servicio de internet satelital.

La batalla legal entre el magnate tech y Brasil

Starlink, con 250,000 clientes en Brasil, informó al regulador de telecomunicaciones que no cumplirá con la orden de bloquear X en el país. Al operar vía satélite, la compañía no depende de infraestructura centralizada en Brasil, lo que le permite técnicamente no acatar la prohibición. Esta acción de Musk desafía directamente la capacidad del Estado para imponer su control sobre las plataformas digitales y abre un debate sobre los límites del poder estatal frente a las grandes tecnológicas.

Millones de usuarios perdieron acceso a la red social X

La respuesta de Musk no se ha limitado a evitar el bloqueo de X. También recomienda a los brasileños utilizar VPNs para eludir la restricción, una medida que añade tensión a la disputa con las autoridades brasileñas.

La situación presenta un dilema para los reguladores. Si Brasil decide revocar la licencia de Starlink, la naturaleza satelital del servicio dificultaría un bloqueo efectivo. En contraste, con infraestructuras tradicionales el control del acceso a las plataformas sería más sencillo. La capacidad de Starlink para operar sin infraestructura física en Brasil crea un precedente único que podría influir en cómo otros países regulan los servicios de internet satelital.

Si tienes Starlink en Brasil podrías seguir usando la red social X

El resultado de esta batalla legal y tecnológica no solo tendrá repercusiones en Brasil y en las empresas de Musk, sino que también podría reescribir algunas de las reglas para la regulación de internet a nivel global. Las implicaciones afectan temas como la libertad de expresión, la moderación de contenidos, los derechos de autor, la soberanía nacional y el poder corporativo.

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