Trucazo para ahorrar con tu refrigerador: esta es la temperatura que debe tener para conservar alimentos y gastar menos electricidad
Con este método podrás reducir notablemente el consumo energético.
Hoy en día cualquiera de nosotros busca tips o consejos para ahorrar dinero. Uno de los métodos más efectivos es a través del uso consciente de la energía eléctrica. Es que los artefactos que tenemos en casa y están conectados constantemente gastan electricidad en exceso: televisor, microondas, lavadora y refrigerador, por ejemplo.
Respecto a este último, indispensable para la vida diaria por su función para conservar alimentos en buen estado, cuenta con un secreto para ayudarnos en la economía de nuestro bolsillo: ajustar la temperatura para gastar menos electricidad y garantizar la conservación óptima de todo lo que hay en su interior.
¿Cuál es la temperatura correcta para un refrigerador?
Sabemos que este electrodoméstico debe mantenerse en funcionamiento las 24 horas del día, lo que puede tener un impacto considerable en la factura de electricidad si no se gestiona de manera correcta. En este contexto, mantener el refrigerador a una temperatura demasiada alta o excesivamente baja representará un derroche de energía y también afectará al estado de los alimentos.
La temperatura recomendada para la mayoría de los refrigeradores domésticos debe estar en torno a los 4 °C. Esta temperatura es lo suficientemente baja como para prevenir el crecimiento de bacterias y mantener los alimentos frescos sin generar un derroche de electricidad, por lo que significará un ahorro en la boleta de luz.
Aquí es importante recordar que cada grado por debajo de esta cifra, según expertos, representa un mayor esfuerzo para el compresor (motor) del refrigerador, lo que se traduce en un aumento del consumo de electricidad. Es decir que, cuanto más baja sea esta temperatura, más intensamente tiene que trabajar el compresor para mantener el nivel de frío.
Incluso, estudios determinan que, por cada grado adicional de enfriamiento del refrigerador, el consumo de energía puede aumentar entre un 7% y un 10%.
Por último, es menester saber que mantener una temperatura excesivamente baja del artefacto no solo incrementa el gasto energético, sino que también reduce su la vida útil. Esto se debe a que el compresor, sometido a un trabajo constante y más exigente, se desgasta con mayor rapidez. Por lo tanto, se deben respetar los 4°C sugeridos.