Rise of the Ronin: el éxito de Team Ninja en el Mundo Abierto que me sorprendió en múltiples niveles
El juego logra capturar magistralmente el choque de culturas entre Japón y Occidente en el siglo XIX, reflejado tanto en su estética como en su jugabilidad.
Desde el lanzamiento de Nioh, los seguidores del género soulslike han estado ansiosos por sumergirse en nuevas experiencias que desafíen sus habilidades. Sin embargo, para muchos, ninguna entrega hasta la fecha había logrado satisfacer completamente esa sed de desafío y profundidad. Es por eso que, como un ávido aficionado de la fórmula soulslike, mis expectativas estaban en lo alto cuando me enfrenté a Nioh, y más tarde a Nioh 2. Aunque encontré aspectos que disfruté, la sensación persistente de que faltaba algo se mantuvo.
Con la llegada de Wo Long: Fallen Dynasty, experimenté cambios notables que revitalizaron mi interés. Pero fue con la anticipada Rise of the Ronin que finalmente encontré lo que había estado buscando. Más que un juego, este título de Team Ninja es una epopeya, una aventura ambiciosa que me sorprendió en múltiples niveles, sobre todo por su escala.
El mundo de Rise of the Ronin está repleto de actividades y estímulos, desde la narrativa inmersiva hasta un sistema de combate que se siente como un eco poderoso de los juegos anteriores del estudio. Aunque no es estrictamente un soulslike, su combate retiene la esencia de ese género, ofreciendo una experiencia desafiante pero gratificante.
Una de las características más notables de Rise of the Ronin es su enfoque en la narrativa y la toma de decisiones. Ambientado en una época de agitación política en Japón, el juego presenta dos facciones principales: el shogunato y los expulsionistas. La elección de aliarse con una u otra tiene repercusiones significativas en la historia, agregando una capa adicional de profundidad y rejugabilidad.
El juego logra capturar magistralmente el choque de culturas entre Japón y Occidente en el siglo XIX, reflejado tanto en su estética como en su jugabilidad. A través de sus tres impresionantes regiones para explorar -Yokohama, Edo y Kioto-, Rise of the Ronin ofrece una experiencia visualmente cautivadora que sumerge al jugador en un mundo rico en detalles y contrastes.
Pero donde Rise of the Ronin verdaderamente brilla es en su sistema de combate. Con una amplia variedad de armas japonesas y occidentales, cada una con su propio conjunto de movimientos y estilos, el juego desafía al jugador a adaptarse constantemente a los diferentes desafíos que se le presentan. El sistema de estilos añade una capa estratégica adicional, obligando al jugador a considerar cuidadosamente su enfoque en cada encuentro.
Además, el componente social del juego, reminiscente de títulos como Stardew Valley, agrega una dimensión adicional a la experiencia. La capacidad de desarrollar relaciones con los personajes del juego y participar en romances añade una profundidad emocional que complementa perfectamente la acción intensa del combate.
En resumen, Rise of the Ronin no revoluciona el género, pero eso no le impide ser una experiencia altamente satisfactoria para los fans de Team Ninja y los amantes de los juegos de mundo abierto. Con su combinación de narrativa envolvente, combate desafiante y exploración expansiva, el juego ofrece una experiencia que cautivará a los jugadores durante horas, dejándolos con la sensación de que siempre hay una razón para volver a sumergirse en su mundo.
